Tras su gran fama y rápido reconocimiento internacional, Tulum se ha convertido en un pueblo turístico fantasma.
Siendo una de las perlas de la Riviera Maya, actualmente sufre una importante baja en el turismo nacional e internacional.
Ante esta situación hay despidos masivos en los complejos turísticos y restaurantes y demás locales comerciales, las playas que algunas son privadas se encuentran en abandono total, construcciones de locales y del sector hotelero frenadas y negocios vacíos es algo de lo que se presenta en últimas semanas.
Esta situación podría deberse al altísimo costo de actividades, la falta de hospitales o de atención médica, también falta de servicios esenciales y un elevado precio de transporte tanto para locales como extranjeros.
Solo esperemos que las autoridades correspondientes actúen de manera rápida para corregir este problema o los empresarios inicien una estrategia para llamar al turismo y poder salvar trabajos y la economía del lugar.